miércoles, 27 de abril de 2016

TE DEUM

A pocas horas de celebrar un año más de vida (o uno menos de vida, como decía mi abuela of course)
debo decir que llego agotado.

Estas dos últimas semanas fueron tal vez las más complicadas en mi vida laboral... Conflictos sociales que podrían tener consecuencias funestas para el actual gobierno (y también dejarnos en la calle a todos los funcionarios encargados de atender temas de conflictividad, cambios inesperados con un trasfondo oscuro, oscuro (iluminado obviamente por los "intereses") y sobre todo de darme cuenta (y no es por el motivo de las elecciones de mi país) que a los políticos casi poco (o nada) le importamos las personas de a pie.

Me consuelo, el recordar (no se porque) a todas las personas que ya no están conmigo y que las perdí el año pasado, extraño la singularidad de cada uno y lo que representaban en mi vida.

Acabamos de cenar, me están esperando para ir un momento a celebrar (como la cenicienta deberé huir a las 12 of course) no porque el encanto se acabe, mañana será un día complicado, no porque cumpliré un año menos de vida, no, por las cosas que se estarán decidiendo en tormo a mi vida de casi dos años (cambiar de puesto? mudarme de ciudad? responsabilidades judiciales?)

De todos modos (como decía cierta araña, para los que me entiendan) hay que aprender a ser agradecidos, sí, agradecidos.

Por la vida, por la celebración, por las broncas, por quien espero me llame a las 12 mientras huyo hábilmente y también por quien desde donde este lee este, ya nos une algo... mis peregrinas ideas.



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